¿Debemos o no vendar el pie cuando sufrimos un esguince?

 Los esguinces son algo que está a la orden del día; el desgarre de ligamentos más común es el esguince de tobillo, el cual puede ser provocado por músculos débiles, lesiones en los nervios de las  piernas, uso de calzado con tacones muy altos y estrechos, y ciertas maneras de caminar. A la hora de sufrir un esguince en el tobillo nuestras piernas pierden parte de su movilidad. Un esguince en el pie puede ser algo más delicado de lo que parece a simple vista, y por ello es recomendable que antes de nada acudamos al médico o a un especialista para que nos lo revise y determine o deje descartada cualquier tipo de rotura de hueso.

Un esguince es la ruptura de los ligamentos (tejido elástico resistente que conecta a los huesos entre sí) que mantienen unida una articulación. Dado que sus síntomas son similares a los de una fractura, debe tratarse como tal en caso de duda.

Una vez terminado esto nos surge la duda siempre presente de si debemos mantenerlo vendado o no para conseguir que se recupere lo antes posible y volvamos a tener el vigor y la fuerza de siempre.

Normalmente los primeros días después de haber sufrido un esguince debemos inmovilizar la zona para evitar que nos duela. Para ello aplicaremos un vendaje que nos ayudará a reducir la inflamación, esto lo debemos de complementar con la colocación de hielo sobre la zona dañada para disminuir el hinchazón. Mantener la pierna elevada y en reposo es fundamental para evitar, por un lado empeorar la lesión con el movimiento, y por el otro mejorar el drenaje de la parte afectada.

 Es necesario que para curar un esguince echemos mano de los vendajes, y es que será la mejor manera de acelerar la recuperación a través del descanso, y evitar arrastrar molestias a lo largo de meses. Eso sí, en ningún momento debemos dejar de mover la zona, para evitar un debilitamiento excesivo de los músculos, que tenemos que fortalecer al máximo una vez nos hayamos recuperado para así evitar futuras dolencias. 

El desgarre de ligamentos más común es el esguince de tobillo, el cual puede ser provocado por músculos débiles, lesiones en los nervios de las  piernas , uso de calzado con tacones muy altos y estrechos, y ciertas maneras de caminar.

         

                                                                                         

Lo que se muestra en las fotos es un vendaje de máxima seguridad, finalizando con un vendaje circular, el cual proporciona al paciente sensación  de seguridad, protección y estabilidad...